Fast Fashion es sinónimo de caos, principalmente por el impacto ambiental, social y económico que tiene, pero parece que Zara -empresa que hasta el día de hoy es el sinónimo del fast fashion- está por cambiar las reglas del juego.
Anteriormente, otras empresas de este tipo como H&M habían realizado esfuerzos para disminuir su huella ecológica con estrategias de reciclaje de textiles, pero Zara está dando un paso adicional.
Debido al desastre que ha sido el modelo de negocio de la moda rápida, Zara ha tomado medidas para limpiar su imagen y para contrarrestar el problema que crearon, desarrollanron colecciones que incorporan productos responsables promoviendo el cuidado de la naturaleza, así como una cadena suministro y producción más humana.
“…Las flagship ecoeficientes de Zara ilustran el compromiso de la marca con la sostenibilidad, del mismo modo que la instalación progresiva de contenedores en sus tiendas destinados a la reutilización y reciclaje de prendas o la puesta en marcha de un servicio de recogida gratuita de ropa a domicilio en el momento de la entrega de pedidos online…”, de acuerdo con la firma.
Pero en próximos meses, Zara sorprenderá con su nueva temporada de otoño-invierno con la colección ‘Join Life’ para TRF, la línea joven de Zara, la cual es una propuesta de tejidos eco-friendly.
Para esta colección se utilizo el proceso textil ‘upcycling’ el cual consiste en reciclar tejidos para crear nuevos de la misma calidad. La diferencia radica en la producción, ya que existirá un menor consumo de recursos de agua y energía.
Adicional a los tejidos reciclados, la nueva colección también incorpora el poliéster reciclado, el cual se elabora con plástico reciclado -botellas, empaques, etc- con el que se generan fibras con las mismas características que el poliéster convencional; de esta forma se promueve no sólo el reciclaje de textiles, también el del plástico.
Por último y como una nueva tendencia -de hecho, la ONU apoyó una colección de este tipo en días recientes- Zara incursiona en el algodón reciclado mezclado con madera de bosque de origen sostenible, creando REFIBRA Lyocell.
Esta fibra, creada a través de los residuos textiles de la marca, se trituran y se mezclan con fibras puras para crear nuevos tejidos; logrando una nueva colección con prendas de siluetas amplias y relajadas, en colores básicos como el blanco, verde y azul que van de la mano con el ‘mood’ natural y orgánico.
Todavía falta un gran camino por delante para lograr que la industria de la moda sea realmente sostenible, pero si Zara pone el ejemplo y da resultados concretos con estas nuevas colecciones, será cuestión de tiempo para que otras empresas repliquen el concepto.
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Vía: In Style
Imagen: Zara