Michael Gove, es un político británico del partido Conservador y miembro del parlamento del Reino Unido para la circunscripción de Surrey Heath desde 2005, reveló una consulta sobre medidas para reducir la contaminación plástica y proteger los océanos.
Popotes, agitadores y cotonetes de plástico podrían tener sus días contados en Reino Unido ya que podría prohibirse dentro de un año, de acuerdo con los planes del gobierno para reducir la contaminación.
Para saber si esta nueva medida tendrá éxito, se lanzó una consulta sobre las diferentes propuestas este lunes. De la mano, la Secretaría de Medio Ambiente también mencionó el éxito del cargo de £0.05 centavos de libra esterlina que se impuso a las bolsas de plástico de un sólo uso, ya que se ha reducido un 86% el uso de este producto en los principales supermercados.
"...Hoy intensificamos nuestros esfuerzos para cambiar el rumbo de la contaminación plástica y garantizar que dejamos nuestro medio ambiente en un estado mejor del que lo heredamos...", dijo Gove.
Se estima que tan sólo Inglaterra, anualmente se utilizan 4,700 millones de popotes de plástico, 316 millones de agitadores de plástico y 1,800 millones de cotonetes de plástico; de este último alrededor del 10% de los cotonentes se tiran en los inodoros y terminan en vías fluviales y océanos lo que se traduce en costos millonarios para el gobierno en limpieza.
Esta prohibición busca que las empresas que comercializan estos productos cambien y ofrezcan al público alternativas no plásticas, de fácil acceso y a un costo similar.
De autorizarse, la prohibición entraría en vigor entre octubre de 2019 y octubre de 2020, aunque se tendrían excepciones, por ejemplo los popotes pueden ser utilizados por cuestiones médicas y incluirían en la legislación.
La Unión Europea (UE) anunció a principios de este año que introduciría medidas similares, lo que provocó que el Reino Unido siga el ejemplo de Bruselas, ya que es poco probable que el cambio se produzca lo suficientemente rápido como para formar parte del tramo de las leyes de la UE que deben incorporarse a la legislación británica después del Brexit.
"...Nuestros preciosos océanos y la vida silvestre necesitan una protección urgente contra la devastación que pueden causar los artículos de plástico. Felicito a los minoristas, bares y restaurantes que ya se han comprometido a quitar los popotes de plástico y los agitadores, pero reconocemos que necesitamos hacer más…”, dijo Gove.
Se estima que hay más de 150 millones de toneladas de plástico en los océanos del mundo, y esa cifra se triplicará para el 2025. Un millón de aves y al menos 100,000 mamíferos marinos mueren cada año por comer y enredarse con desechos plásticos.
Es responsabilidad de todos, no sólo del gobierno, el reducir el consumo de productos plásticos. Como sociedad, no podemos esperar a que el gobierno tome acciones, ya que es lento el proceso, es más rápido hacer el cambio nosotros.
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Vía: The Guardian Imagen: Getty Images / Monty Rakusen