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Fondo para el Cambio Climático, uno de los fideicomisos en peligro. ¿Qué hace este fondo?


Diversos países han creado un fondo para hacer frente al cambio climático, algunos con un presupuesto más robusto, otros menos, pero casi todas las naciones tienen un ‘apartado’ para encarar las situaciones que se devengan de la crisis climática.


Ahora, con el capricho del presidente López Obrador, diferentes fideicomisos desaparecerán; no estamos en contra de que se hagan revisiones a estos fondos, es más deberían de hacerse regularmente para evitar desvíos y que se usen correctamente, pero extinguir solo porque quiere usar esos recursos para sus planes como el aeropuerto, tren maya y dos bocas, es lamentable.


Organizaciones ambientalistas pidieron al Senado de la República que salve el Fondo para el Cambio Climático, uno de los fideicomisos cuya extinción se aprobó ayer en la Cámara de Diputados.


La Ley General de Cambio Climático (LGCC) creó este instrumento en 2012 con la finalidad de captar y canalizar recursos públicos y privados, tanto de México como internacionales, para implementar acciones que afronten el cambio climático, señala el Artículo 80.


La iniciativa presentada por el Grupo Parlamentario de Morena el 9 de septiembre propone que permanezca, pero bajo un mecanismo diferente al de un fideicomiso.


Según la propuesta, los recursos serán administrados y operados por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), que también emitirá las reglas de operación. ¿Es realmente la Semarnat quien debería encargarse de esto?


Los ambientalistas consideran que acabar con el fideicomiso del Fondo para el Cambio Climático sería un error en la lucha contra la crisis climática y una violación al estado de derecho porque pone en riesgo el acceso a un medio ambiente sano.


“...De eliminarse este Fondo se reducirían aún más los mecanismos de financiamiento para atender el cambio climático frente a un PPEF 2021 que solo destina 1.1% de recursos públicos a este fin…”, dice CEMDA.

La creación del Fondo respondió a la necesidad imperante de incrementar los recursos existentes para la atención del cambio climático, la cual continúa vigente al día de hoy, y que se hace cada vez más necesario ante un Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2021 que contempla únicamente dirigir 1.1% de los recursos públicos a atender el cambio climático. Mientras que los recursos dirigidos a la explotación de combustibles fósiles, principal fuente de emisiones causantes del calentamiento global, representa 11.6% del PPEF total.


Uno de los aspectos centrales de la creación del Fondo ha sido apoyar medidas de adaptación debido a la alta vulnerabilidad a la que México está expuesto ante los impactos de un cambio climático que ya están sucediendo y que se verán agravados en el futuro cercano.


De igual forma, el Fondo promueve medidas que tengan un doble impacto, en materia de mitigación y adaptación; además de apoyar medidas de mitigación para reducir las fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero, lo cual es clave para que México cumpla con sus compromisos para reducir emisiones y evitar un aumento de la temperatura global de más de 1.5 grados centígrados, tal como quedó establecido hace cinco años en el Acuerdo de París.


Las agrupaciones que piden al Senado salvar el Fondo para el Cambio Climático son el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), el Grupo de Financiamiento Climático en Latinoamerica y el Caribe (GFLAC), Fridays For Future (FFF) México, Extinction Rebellion México, Huerto Roma Verde y Ruta Cívica.


"Hacemos un llamado a nuestras y nuestros representantes en la Cámara de Senadores para que no aprueben la extinción del Fondo para el Cambio Climático, ni ningún fideicomiso de cultura, ciencia y medio ambiente".
"Su extinción atenta contra la obligación constitucional de garantizar el derecho a un medio ambiente sano", indican.

De acuerdo con las organizaciones, este fideicomiso apoya medidas de reducción de gases de efecto invernadero que permitirían a México cumplir sus compromisos ante el Acuerdo de París, pacto internacional que busca mantener el aumento de la temperatura por debajo de los 2 grados centígrados para finales del siglo.


Para el 2030, el País se comprometió a reducir el 22 por ciento de sus emisiones de gases de efecto invernadero y el 51 por ciento de carbono negro.


¿De que se trata el Fondo para el Cambio Climático?


El Fondo para el Cambio Climático estaba como un fideicomiso de administración y pago, apunta el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC).


Este tipo de instrumentos permite que el fideicomitente (SHCP) transmita a una institución fiduciaria (Nacional Financiera) la propiedad de bienes que servirán para pagar las obligaciones del fideicomitente con la unidad responsable (Semarnat).


La Semarnat presidía el Comité Técnico del fondo, que contaba con la participación de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la Secretaría de Economía, la Secretaría de Gobernación (Segob), la Secretaría de Bienestar, la Secretaría de Comunicaciones y Transporte (SCT), la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), la Secretaría de Energía (Sener) y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).


Hasta ahora el Fondo ha operado a través de convocatorias que han permitido que el recurso llegue a diversos destinos, incluidos proyectos a nivel estatal y local.


Si bien es necesario reforzar su gestión y mejorar sus mecanismos de transparencia y rendición de cuentas, así como contar con un plan de recaudación de recursos para fortalecer su operación, acabar con él sería un gran error para la lucha contra el cambio climático y una clara violación al estado de derecho, al poner en riesgo un acceso a un medio ambiente sano.


Su cancelación supondría un retroceso importante en el financiamiento de acciones dirigidas a este fin, particularmente porque se ha promovido que el Fondo sea destino de recursos como los provenientes del mercado de carbono y del impuesto al carbono, lo que permitiría tener más recursos disponibles para la atención del problema en México.


El año pasado, el Comité aprobó un monto de hasta 40 millones 498 mil 271 pesos para financiar proyectos de adaptación y mitigación al cambio climático, se lee en la convocatoria de 2019.


Se eligieron ocho proyectos, que podían recibir cada uno hasta 10 millones 124 mil 567 pesos. Uno de ellos buscaba conservar y restaurar manglares en las Áreas Naturales Protegidas (ANP) de Celestún, Yum Balam, Nichupté y Sian Ka'an.


Otro estaba dedicado a mejorar la conectividad y el manejo de las ANPs Mariposa Monarca y Nevado de Toluca, mientras que uno más se dedicaba a fortalecer el ecosistema costero del noroeste de la Península de Yucatán.


Presidente, Diputados y Senadores, tengan presente que en caso de modificar este Fondo, ustedes serán los responsables de que México no pueda hacer frente a la crisis climática; en vez de extinguirlo deberían aumentar el presupuesto y controlar la forma en que se gestiona. Piensen más allá del populismo y dense cuenta de lo que representaría eliminar algo así.


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Vía: Agencias

Imagen: Freepik


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